SEPARANDO LA COSECHA

“Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga”. Mateo 13:43

En el ministerio llamado Harvest to Hope, que provee de comida a los necesitados, los voluntarios separan la comida que aún se puede comer de los desperdicios. Separan alimentos nutritivos de los que ya se están pudriendo.

Esta separación o escogencia de alimentos puede ser comparada a lo que Dios dice que hará en Mateo 13:41 “Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad” En este pasaje claramente podemos entender que Dios separará las personas que no obedecen sus preceptos de los justos – los verdaderos creyentes.

El verdadero creyente es la persona que acepta la Palabra de Dios en su corazón, tiene fe para creer en Jesús y sus promesas. Su fe los lleva a la revelación del plan que Dios tiene para ellos. Incluso cuando no entienden las circunstancias de la vida, solo leen la biblia para que Dios los ayude a comprender lo que acontece.

La fe en Jesús y la motivación para conocerlo más y más cada día y luego obedecerlo, es lo que Dios llama justicia, en resumen, este es el estilo de vida del verdadero creyente.

Llegará un día en el que Dios separará las personas. Las escrituras nos ensenan que el criterio que Dios usara para esta separación es la Justicia. Dios separara los buenos de los corruptos. El fruto bueno del podrido. Separara los que no obedecen la ley de Dios de los verdaderos creyentes.

Toma un descanso. Medita ¿Lees o escuchas la Biblia? ¿Entiendes los preceptos de Dios y los pones en práctica? Una de las mayores mentiras en la que muchos se encuentran atrapados es este tipo de pensamiento: "Tengo mi propia relación con Jesús". No podemos tener nuestra propia relación con Jesús. Todos estamos llamados a la misma relación – una relación de profunda obediencia. "Bienaventurados los que oyen la palabra de Dios y la obedecen". Lucas 11:28.

Toma la Biblia, confía en ella, obedécela. ¡Jesús no está bromeando! Cuando lo hagas, brillarás como el sol en el Reino de Dios. ¡Brilla!